-
No sabes cuánto estas ganando a la semana.
-
Tienes clientes entrenando sin pagar.
-
Te dicen “mañana te pago” y terminas olvidando cobrar.
-
Recuerdas uno por uno sus pagos.
-
Sientes que trabajas todo el día, pero tus ingresos no crecen.
-
Vives con el temor del robo hormiga y no sabes si el staff cobra correctamente.
